sábado, 22 de agosto de 2009

Poemas - "Para no Diluirme en la Nada"

PARA NO DILUIRME EN LA NADA

Autora: Elvira Fernández


"PARA ASTRID DONDE QUIERA QUE ESTÉ Y
PARA JUANI QUE SE QUEDÓ A ACOMPAÑARNOS
"

1.-

Acuérdate
De respirar una plegaria
Cuando el rumiar carcoma tu mente
Cuando salpiquen oleadas de pesar

Acuérdate de la fe
Cuando cada despertar
Arda en el pensamiento
Preguntando

¿Será hoy que despierte de ésta dilución?



2.-

Diosa Madre silente
Concédenos sumergir nuestra nada
Susurrando
Martilladas oraciones fervientes
Que somos el resto,
Que se quedó de este lado
Anonadado

…………………………………

Otra vez es domingo
Ya no se escucha tu voz.



3.-

Desde que te fuiste
Las ánimas persiguen mis pasos
Suspiran cánticos
Acorralándome
Desde que te fuiste
Sueño que perdí tu rostro amado
Y eso que lo miré atrapándolo
Desolados minutos antes de partir
Cuando tus silencios estallaron
En preguntas irremediables
Desde que te fuiste
Una garra estruja mi corazón
Atenazándolo, huérfano entre gemidos helados
Desde que te fuiste
Ya nadie puede dormir.



4.-

Hágase tu voluntad, Padre
Te ruego comprendiendo
En el absurdo intento
De aceptar tu más Oscuro Misterio
Arguyendo en todo tiempo
Con ya fatigado paso
Sabiendo que es mi ceguera temporal
La que se lamenta
Con majaderías de infante
Que en un golpe de gracia
Ha perdido a su madre.

Padre, contempla el deterioro
De las certezas fieras,
Perdona la rabia que a mi pesar estanca
Instalando en cada poro que llora
Más no por eso se rebela
Cavilando sobre esta vida eterna
Que nos espera
Agotada de aguardar inútilmente
El instante de conciencia suprema.
Hágase tu voluntad
Es la costosa plegaria
Pronunciada por éstos esperanzados labios
Amén



5.-

Vieja Noche encerada,
De intrusos noctámbulos poblada
Arrastra tus plomizos pies,
Desde los cansados martes oyentes
Absuelvan cantinelas penitentes.

En vano tiendo los brazos
Será imaginación?
Nada más para decirte
Sentémonos juntas las dos
Cuéntame -Si te dejan-
Qué dicen por ahí de Dios

Rullas infantiles me riman
Hueca suena mi voz
Cursis sonetos gastados
Misericordioso sabor salado

humedece en sollozos mi almohada
Bálsamo para el dolor

Broncíneas campanas doblan hermanas
A misa de Gallo nos llaman
No voy

Muy quedo repito un albo himno interior
Lamentos en sueños
El Ave María luego

Tenues flautas murmuran…
Un responso madrugador


6.- Incertidumbre

Será que puedes verme
Cuando enciendo una vela nueva

Si...
Podrás traspasar el umbral del temor
Llegar a un lugar radiante
Fundirte en un mar de Amor? …

Gesta inútil de palabras
Interminables días sin tí
Cuántas veces te rozo y no te veo
Se que te vas volando
Surcando un eterno Cielo
Hilando el transparente velo
Que el Clemente
Despliega ante mí

¡Ábrase a tu paso la Infinita Matriz!


II PARTE


1.-

Percibo que tu aliento roza cercano mi voz
Que tus sueños cavilan inventándome
Desde esta, la otra historia
Fulminando al triste ser que puebla nuestros sueños
Invadiendo espacios ocupados
Con intangibles llamados que cercenan
Atravesándonos
Grises en descomposición.



2.

Milagro oír tu voz
De nostalgias inmemoriales,
Cargada
De anuncios simples,
Amada
Caigo en tus ojos de pasión,
Abrasada,
De inútiles recuerdos,
Exaltada
Hoy somos dos



3.-

Duermes acaparando todos mis pensamientos
Anhelos que destruyen todo lo que tengo
Que me has vuelto tuya, sólo un reflejo
Mi fuerza encarcelada,
mi pluma seca
No me dejaste nada.
Una mal sueño, espero
Que llevo prendido como un presentimiento
Presagio de días sueltos
Si necesitarás mi perspectiva ilusa…
Yo, supongo que envejezco
De ansiedades nocturnas
Recogiendo pretéritas treguas
Para armar una paz compacta.


4.-

Resuenan palabras prestadas
olvidadas, regresan
A interrumpir mi silencio
Sacan ventaja de su condición de habladas
Perturban, dan vueltas
Como moscas se pegan
Inventarlas en un delirio corto
Pronunciarlas
Un desvarío ajeno
Una infeliz obsesión



5.-

Fatigadas vueltas
Insomnio febril
Cuerpo atornillado a una insólita razón
Pernocto incierta en una estancia terrena
Confundo desayuno con la cena
Agito constantes caídas
Hemisferios
Horas
Asfixias
Naufrago en sábanas limpias
La hora espera, es mía
Compartimientos libres aguardan mi vida
Luz que se descuelga por la ventana
Alumbrando un hueco en tu lado de la cama
El mismo que había cuando todavía estabas
Ausencia al fin por vidas prolongadas
Te has ido y aún sigues aquí
Regresando cada mañana
Gerundio que implica un acontecer momentáneo
El café se me atraganta

Retumban tus pasos en la grada
Eso es todo
En mi mesa dormitan dos llaves blancas
Hito que rompe la convivencia forzada


Un sonsonete repite
¡No hay contradicción!
Insoportable alivio siento
haber pronunciado ése adiós



23/08/09
Derechos de Autor Reservados

No hay comentarios:

Publicar un comentario